martes, 29 de marzo de 2011

Novena a la Confianza en el Divino Niño


Niño amable de mi vida, consuelo de los cristianos
La gracia que necesito, pongo en tus benditas manos,

Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea Tu nombre; venga a nosotros Tu reino, hágase Tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, y perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos de todo el mal. Amén.

Tú que sabes mis pesares pues todos te los confío,
Da la paz al angustiado y alivio al corazón mío,

Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita eres entre las mujeres y bendito es el fruto de Tu vientre Jesús. Santa María madre de Dios, ruega Señora por nosotros los pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Y aunque tu amor no merezco, no recurriré a ti en vano,
Pues eres hijo de Dios y consuelo del cristiano.

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en un principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.
Acuérdate oh niño santo, que jamás se oyó decir, que alguno te haya implorado sin tu auxilio recibir, por eso con fe y confianza, humilde y arrepentido, lleno de amor y esperanza, este favor yo te pido: (hacer aquí la petición)

Divino niño Jesús, bendícenos (7 veces)

Amén.

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lunes, 21 de marzo de 2011

Oración por Vocaciones Sacerdotales.

Jesús Buen pastor,
que al ver a la multitud,
tuviste compasión de quienes
estaban fatigados y abatidos,
como ovejas que no tienen pastor,
y dijiste a tus discípulos:
“La cosecha es abundante,
pero los trabajadores son pocos,
rueguen al dueño de los sembrados
que envíe trabajadores para su cosecha”;
humildemente te pedimos
que envíes a nuestra Iglesia
numerosas y santas vocaciones sacerdotales
y a la vida consagrada.
Te lo pedimos por medio de la Santísima
Virgen María, Nuestra Señora de Fátima,
y Santo Domingo de Guzmán,
Patronos de nuestra Diócesis. Amén.

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miércoles, 9 de marzo de 2011

Oraciones al Espíritu Santo para pedir sus siete Dones

I
¡Oh Espíritu Santo!, llena de nuevo mi alma con la abundancia de tus dones y frutos.
Haz que yo sepa, con el don de Sabiduría, tener este gusto por las cosas de Dios que me haga apartar de las terrenas.
Que sepa, con el don del Entendimiento, ver con fe viva la importancia y la belleza de la verdad cristiana.
Que, con el don del Consejo, ponga los medios más conducentes para santificarme, perseverar y salvarme.
Que el don de Fortaleza me haga vencer todos los obstáculos en la confesión de la fe y en el camino de la salvación.
Que sepa con el don de Ciencia, discernir claramente entre el bien y el mal, lo falso de lo verdadero, descubriendo los engaños del demonio, del mundo y del pecado.
Que, con el don de Piedad, ame a Dios como Padre, le sirva con fervorosa devoción y sea misericordioso con el prójimo.
Finalmente, que, con el don de Temor de Dios, tenga el mayor respeto y veneración por los mandamientos de Dios, cuidando de no ofenderle jamás con el pecado.
Lléname, sobre todo, de tu amor divino; que sea el móvil de toda mi vida espiritual; que, lleno de unción, sepa enseñar y hacer entender, al menos con mi ejemplo, la belleza de tu doctrina, la bondad de tus preceptos y la dulzura de tu amor. Amén.
II
Ven Espíritu Santo, inflama mi corazón y enciende en el fuego de tu Amor. Dígnate escuchar mis súplicas, y envía sobre mí tus dones, como los enviaste sobre los Apóstoles el día de Pentecostés.
Espíritu de Verdad, te ruego me llenes del don de Entendimiento, para penetrar las verdades reveladas, y así aumentar mi fe; distinguiendo con su luz lo que es del buen, o del mal espíritu.
Espíritu Sempiterno, te ruego me llenes del don de Ciencia, para sentir con la Iglesia en la estima de las cosas terrenas, y así aumentar mi esperanza; viviendo para los valores eternos.
Espíritu de Amor, te ruego me llenes del don de Sabiduría, para que saboree cada día más con qué infinito Amor soy amado, y así aumente mi caridad a Dios y al prójimo; actuando siempre movido por ella.
Espíritu Santificador, te ruego me llenes del don de Consejo, para obrar de continuo con prudencia; eligiendo las palabras y acciones más adecuadas a la santificación mía y de los demás.
Espíritu de Bondad, te ruego me llenes del don de Piedad, para practicar con todos la justicia; dando a cada uno lo suyo: a Dios con gratitud y obediencia, a los hombres con generosidad y amabilidad.
Espíritu Omnipotente, te ruego me llenes del don de Fortaleza, para perseverar con constancia y confianza en el camino de la perfección cristiana; resistiendo con paciencia las adversidades.
Espíritu de Majestad, te ruego me llenes del don de Temor de Dios, para no dejarme llevar de las tentaciones de los sentidos, y proceder con templanza en el uso de las criaturas.
Divino Espíritu, por los méritos de Jesucristo y la intercesión de tu Esposa, María Santísima, te suplico que vengas a mi corazón y me comuniques la plenitud de tus dones, para que, iluminado y confortado por ellos, viva según tu voluntad, muera entregado a tu Amor y así merezca cantar eternamente tus infinitas misericordias. Amén.
III
Amor infinito y Espíritu Santificador:
Contra la necedad, concédeme el Don de Sabiduría, que me libre del tedio y de la insensatez.
Contra la rudeza, dame el Don de Entendimiento, que ahuyente tibiezas, dudas, nieblas, desconfianzas.
Contra la precipitación, el Don de Consejo, que me libere de las indiscreciones e imprudencias.
Contra la ignorancia, el Don de Ciencia, que me libre de los engaños del mundo, demonio y carne, reduciendo las cosas a su verdadero valor.
Contra la pusilanimidad, el Don de Fortaleza, que me libre de la debilidad y cobardía en todo caso de conflicto.
Contra la dureza, el Don de Piedad, que me libre de la ira, rencor, injusticia, crueldad y venganza.
Contra la soberbia, el Don de Temor de Dios, que me libre del orgullo, vanidad, ambición y presunción.

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viernes, 4 de marzo de 2011

Rosario por los No Nacidos-Misterios Dolorosos (revelado a Maureen Sweeney Kyle)


Hacer la señal de la Cruz
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor Dios nuestro, en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Introducción
Jesús, María y José, oraban siempre; personalmente y en familia, María Santísima, nos invita hoy, a unirnos con ella en oración,  por medio del Santo Rosario. Pidamos al Espíritu Santo, nos ayude a penetrar, en los misterios de la vida de Jesús y de María. Tal como lo pidió la madre bendita; levantamos al cielo nuestro rosario y decimos,

Reina Celestial, con este rosario enlazamos a todos los pecadores y a todas las naciones a Tu Inmaculado Corazón.

Rezar las siguientes oraciones
 Padre Celestial, durante este tiempo de crisis mundial, permite que todas las almas encuentren su paz y seguridad en Tu Divina Voluntad. Otorga a cada alma, la gracia para entender que Tu Voluntad, es el Amor Santo en el momento presente. Padre Benévolo, ilumina cada conciencia, para que vea las formas, en que no está viviendo en Tu Voluntad. Concede al mundo la gracia para cambiar y el tiempo para hacerlo. Amén.
Divino Niño, al rezar este rosario, te pedimos que quites del corazón del mundo el deseo de cometer el pecado del aborto. Quita el velo del engaño que Satanás ha puesto en los corazones, el cual presenta a la promiscuidad como una libertad; y revela lo que en realidad es: una esclavitud al pecado. Coloca en el corazón del mundo un renovado respeto por la vida desde el momento de la concepción. Amén.

Recitar el Credo
Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra.  Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.  Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

Misterios Dolorosos
Los martes y viernes, meditamos los misterios dolorosos, hagamos reparación, ofrezcamos este misterio en reparación de nuestros pecados y los del mundo entero. Es la cruz de Jesús en símbolo de los cristianos, María acepta en su Fiat todo el dolor y el amor de su misión, acompaña a su hijo en cada momento de su pasión y nos es dada al pie de la cruz como madre, ayúdanos madre a decir si como tú, a unirnos a Jesús a llenarnos de su amór en cada uno de nuestros dolores y nuestras cruces.
  
Primer Misterio Doloroso
Contemplamos la agonía de Jesús en el huerto.

Padre Nuestro
Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y líbranos del mal.

Avemaría (diez veces)
Dios te salve María, llena eres de gracia, el señor es contigo, bendita eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por nosotros los pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte.

Gloria
Toda la Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en un principio ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Jaculatorias
Å      María Madre de gracia y Madre de misericordia, en la vida y en la muerte, ampáranos gran Señora.
Å      Oh Jesús mío, perdónanos, líbranos del fuego del infierno y lleva al Cielo a todas las almas, especialmente a las más necesitadas de Tu Misericordia.
Å      Sagrado corazón de Jesús, ¡en Ti confío!
Å      Señor Jesús, ¡salva y protege a los No Nacidos!
Å      María, Protectora de la Fe y Refugio del Amor Santo, ¡ven en mi auxilio!
Å      Corazones Unidos de Jesús y María, ¡triunfen y reinen!

Segundo Misterio Doloroso
Contemplamos la flagelación del Señor.
(Rezar el padre nuestro, 10 Avemarías, el Gloria y las Jaculatorias)

Tercer Misterio Doloroso
La coronación de espinas.
(Rezar el padre nuestro, 10 Avemarías, el Gloria y las Jaculatorias)

Cuarto Misterio Doloroso
Jesús con la cruz a cuestas.
(Rezar el padre nuestro, 10 Avemarías, el Gloria y las Jaculatorias)

Quinto Misterio Doloroso
La crucifixión y muerte de nuestro Señor Jesucristo.
(Rezar el padre nuestro, 10 Avemarías, el Gloria y las Jaculatorias)

Las siguientes oraciones las ofrecemos por las intensiones del Santo Padre y las necesidades de la Iglesia
Padre Nuestro, que estás en el Cielo, santificado sea Tu Nombre;  venga a nosotros Tu reino; hágase Tu voluntad, en la tierra como en el Cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación, y líbranos del mal.  Amén.

Dios te Salve, María Santísima, Hija de Dios Padre, Virgen Purísima, en tus manos encomendamos nuestra fe para que la alumbres; llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de Tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte.  Amén.

Dios te Salve, María Santísima, Madre de Dios Hijo, Virgen Purísima, en tus manos encomendamos nuestra esperanza para que la alientes; llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de Tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte.  Amén.

Dios te Salve, María Santísima, Esposa de Dios Espíritu Santo, Virgen Purísima, en tus manos encomendamos nuestra caridad para que la inflames; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de Tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte.  Amén.

Dios te Salve, María Santísima, Templo, Trono y Sagrario de la Santísima Trinidad, Virgen Concebida sin la culpa del pecado original. Dios te Salve, Reina y Madre de Misericordia, Vida, Dulzura y Esperanza nuestra.  Dios te Salve.  A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a Ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas.  Ea pues, Señora Abogada nuestra, vuelve a nosotros ésos Tus ojos misericordiosos y después de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto Bendito de Tu vientre, Oh Clemente, Oh Piadosa, Oh Dulce Virgen María.  Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.  Amén.
  
Letanías


Señor, ten piedad de nosotros,
 Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros,
 Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros,
 Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, óyenos,
 Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos,
 Cristo, escúchanos.
Dios, Padre celestial, que eres Dios,
 Ten piedad de nosotros.
Dios, Hijo, Redentor del mundo, que eres Dios,
 Ten piedad de nosotros.
Espíritu Santo, que eres Dios,
 Ten piedad de nosotros.
Santísima Trinidad, que eres un solo Dios,
 Ten piedad de nosotros.
Santa María,
Ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios,
 Ruega por nosotros.
Santa Virgen de las Vírgenes,
Ruega por nosotros.
Madre de Jesucristo,
 Ruega por nosotros.
Madre de la divina gracia,
Ruega por nosotros.
Madre de la Iglesia,
 Ruega por nosotros.
Madre purísima,
 Ruega por nosotros.
Madre castísima,
Ruega por nosotros.
Madre intacta,
 Ruega por nosotros.
Madre inmaculada,
 Ruega por nosotros.
Madre incorrupta,
 Ruega por nosotros.
Madre amable,
 Ruega por nosotros.
Madre admirable,
 Ruega por nosotros.
Madre del buen consejo,
 Ruega por nosotros.
Madre del Creador,
 Ruega por nosotros.
Madre del Salvador,
Ruega por nosotros.
Virgen prudentísima,
Ruega por nosotros.
Virgen digna de alabanza,
Ruega por nosotros.
Virgen  venerable,
 Ruega por nosotros.
Virgen poderosa,
Ruega por nosotros.
Virgen clemente,
Ruega por nosotros.
Virgen fiel,
 Ruega por nosotros.
Espejo de justicia,
Ruega por nosotros.
Trono de la eterna sabiduría,
Ruega por nosotros.
Causa de nuestra alegría,
Ruega por nosotros.
Vaso espiritual,
Ruega por nosotros.
Vaso insigne de devoción,
 Ruega por nosotros.
Vaso honorable,
 Ruega por nosotros.
Rosa mística,
Ruega por nosotros.
Torre de David,
Ruega por nosotros.
Torre de marfil,
Ruega por nosotros.
Casa de oro,
Ruega por nosotros.
Arca de la Alianza,
Ruega por nosotros.
Puerta del cielo,
Ruega por nosotros.
Estrella de la mañana,
Ruega por nosotros.
Salud de los enfermos,
 Ruega por nosotros.
Refugio de los pecadores,
 Ruega por nosotros.
Consuelo de los afligidos,
 Ruega por nosotros.
Auxilio de los cristianos,
 Ruega por nosotros.
Reina de los Ángeles,
 Ruega por nosotros.
Reina de los Patriarcas,
 Ruega por nosotros.
Reina de los Profetas,
Ruega por nosotros.
Reina de los Apóstoles,
 Ruega por nosotros.
Reina de los Mártires,
Ruega por nosotros.
Reina de los Confesores,
Ruega por nosotros.
Reina de las Vírgenes,
Ruega por nosotros.
Reina de todos los Santos,
Ruega por nosotros.
Reina concebida sin pecado original,
 Ruega por nosotros.
Reina subida al Cielo en cuerpo y alma,
 Ruega por nosotros.
Reina del Santísimo Rosario,
 Ruega por nosotros.
Reina de las familias,
Ruega por nosotros.
Reina de la paz.
Ruega por nosotros.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo
 Perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
 Escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
Ten misericordia de nosotros.

Oración final
Bajo tu amparo nos acogemos Santa Madre de Dios, no desprecies las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades, antes bien, líbranos de todos los peligros,  ¡Oh Virgen Gloriosa y Bendita!   Ruega por nosotros Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Oh Dios, cuyo unigénito hijo, con su vida, muerte y resurrección, nos alcanzo en premio de la vida eterna, concédenos a los que recordamos estos misterios del Santo Rosario, imitar lo que contienen y alcanzar lo que prometen, por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Ave María Purísima, sin pecado concebida.

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